Agua potable y saneamiento

Sedimento procedente del tratamiento fisicoquímico de las aguas residuales industriales. Los fangos hidróxidos, generados por las operaciones de tratamiento superficial de las piezas metálicas, se consideran peligrosos.

Fango de depuración procedente de tratamiento por decantación.

Fango procedente de una etapa de estabilización biológica, es decir de degradación de la materia orgánica contenida en los desechos, por vía anaerobia (sin presencia de dioxígeno) en un digestor.

Fango procedente de tratamiento de potabilización del agua.

Sedimentos residuales procedentes de tratamiento de depuración biológica. Los fangos biológicos están principalmente compuestos por cuerpos y secreciones bacterianas.

Cuenca de agua de tormenta que permite el almacenamiento temporal de las aguas de escorrentía con el fin de proteger las viviendas e infraestructuras durante episodios de fuertes lluvias.

Cuenca de agua de tormenta destinada a retener la contaminación de las primeras aguas durante episodios de fuertes lluvias.

Acto administrativo decidido por la colectividad propietaria de una obra de saneamiento, conducente a autorizar un vertido de agua excepcional. Dicha autorización es obligatoria para cualquier conexión de un efluente industrial a una red de saneamiento colectivo. Establece obligatoriamente las características que deben respetar los efluentes, la duración de la autorización y las modalidades de supervisión.

Calificación de un agua cuando tiene la capacidad de disolver el tártaro y la cal. La agresividad de un agua participa en la corrosión de las canalizaciones y equipamientos metálicos. Puede producir la disolución de los metales (níquel, hierro, cobre, plomo, cadmio...) y con ello provocar riesgos sanitarios.

Puesta en contacto de agua y de aire para eliminar del agua ciertos gases disueltos (responsables, entre otros, de malos olores) y para introducir ahí dioxígeno que permite oxidar algunos compuestos tales como el hierro y el manganeso (a fin de prevenir la corrosión).