Regulación

Apreciación de la calidad de un agua sobre la base de las concentraciones de contaminantes, en particular, de las sustancias prioritarias. El estado químico puede ser de dos clases: bueno y deficiente. El buen estado químico de un agua superficial se alcanza cuando las concentraciones de contaminantes no superan las establecidas en las normas de calidad ambiental. El buen estado químico de un agua subterránea se alcanza cuando las concentraciones de contaminantes no muestran efectos de la entrada de agua salada ni superan las establecidas en las normas de calidad ni impiden alcanzar los objetivos para las

Operación consistente en el establecimiento de la curva de tarado de un aparato de obtención de datos que no proporciona una medida directa de la magnitud buscada.